Como consecuencia del rápido crecimiento del e-commerce en todo el mundo, algunas empresas de gran tamaño, como Amazon, se han visto beneficiadas en sus operaciones y funcionamiento gracias a la implementación de procesos automatizados y herramientas tecnológicas de última generación en sus centros de distribución.
En 2012 Amazon se convirtió en la primera empresa en emplear robots en sus centros de distribución. Ahora, cinco años después, cuenta con más de 80,000 robots en todo el mundo. Cada una de esas máquinas es capaz de transportar 340 kilogramos y cuenta con una cámara frontal para detectar obstáculos.
Amazon, que utiliza robots de menos de medio metro de altura y estanterías movibles en lugares como España y Reino Unido, no es un caso aislado. La tendencia en los grandes centros de distribución que dan sustento a toda la industria de las ventas por Internet es la utilización de procesos de automatización que permitan cumplir de manera idónea con la distribución de los productos.
Sin embargo, antes de correr a adquirir una nueva tecnología de automatización, las empresas deben tener en cuenta una serie de factores para determinar cómo implementar un sistema de esta clase. Lo más importante es hacer una planeación cuidadosa.
En primer lugar, hay que determinar cuál es la razón principal para comenzar a automatizar procesos en el centro de distribución. ¿Aumentar la productividad o la velocidad de entrega? ¿Tener un mejor control de las operaciones? ¿Disminuir costos de operación? Cuando se tiene claridad sobre esto, es posible dar la respuesta adecuada a las necesidades específicas de la empresa en cuestión.
En segundo lugar, se deben definir las funciones específicas a automatizar. Los robots de Amazon no trabajan en solitario, sino que se apoyan en seres humanos que deben hacer tareas que requieren más cuidado e improvisación. En otras palabras, ¿qué van a hacer los procesos de automatización en tu empresa?
Antes de tomar la decisión, los directivos deben tener en mente que la automatización puede ser muy costosa, que hay que tener cuidado al momento de seleccionar al proveedor de servicios y que los sistemas son poco flexibles. Por otra parte, la automatización reduce los errores humanos y los costos directos de operación.
Para lograr crear una lealtad de marca, es fundamental que las empresas que venden mercancía por Internet o que hacen envíos de manera frecuente cumplan adecuadamente con la entrega de sus pedidos. Si una marca que está apostando por vender productos a través de la web no es capaz de enviar los productos a sus clientes, entonces esa empresa cerrará. En la actualidad hay que satisfacer las exigentes demandas de los compradores que esperan un envío correcto, rápido y barato, y la automatización puede ser una solución a esas demandas.
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